Un mapache no es una mascota. Te explicamos los motivos

Y no hablamos solo de reptiles peligrosos; también nos referimos a mamíferos como los mapaches. En España es ilegal, puesto que están incluidos en el Catálogo de Especies Exóticas Invasoras, lo que significa que está prohibido tener, transportar, criar, intercambiar, utilizar y comercializar mapaches.

Al margen de la ilegalidad, incluir en el seno familiar a especies como los mapaches solo conlleva problemas. Porque aunque nos parezca un animal adorable, nos apasionen sus ojos negros que simulan un antifaz o su apariencia tranquila, son unos seres muy agresivos que pueden ponerse violentos con los humanos. Y ello nos lleva a la legislación que prohíbe su tenencia, porque dado su comportamiento de adulto, cuando una familia es consciente de que un mapache no es una buena opción como mascota, lo abandona. Este acto está castigado también por ley y la sanción incluye penas de cárcel. Pero es que hay más: su liberación en un entorno que no es el suyo propio pone en riesgo, como especie invasora que es, al resto de la fauna autóctona de nuestro país.

Si todo esto no es suficiente motivo, te explicamos otras razones por las que tener un mapache como mascota no es buena idea:

No está domesticado

Se trata de un animal salvaje, con un comportamiento habituado a vivir al aire libre, donde se mueve en libertad y se enfrenta a otros carnívoros para sobrevivir o por conseguir comida. Introducir a un mapache en un piso o en una casa y obligarlo a vivir en familia es una tarea casi imposible. Amén de que no es un animal que acate órdenes, pueda recibir una educación o vivir según unas reglas de convivencia.

Su cuidado difiere de cualquier animal de compañía

Los mapaches apenas se bañan, solo una o dos veces al año. Tampoco están acostumbrados al cepillado ni a otros cuidados que sí daríamos a un perro o gato. Por tanto, convivir con un mapache implica aceptar que es un animal con un olor corporal fuerte, que muda pelo, mucho, y que hará sus necesidades allí donde necesite. No podremos pasearlo por la calle ni ponerle una correa.

Puede transmitir enfermedades

Al no ser un animal domesticado, puede ser transmisor de enfermedades que pueden afectar a otros animales con los que vivamos o a nosotros mismos. Como su introducción en nuestro país es ilegal, solo se puede adquirir un mapache en el mercado negro y las condiciones en las que llegue no serán idóneas, pues no habrá pasado revisión veterinaria ni contará con un registro sanitario sobre su estado de salud. Por tanto, supone un peligro de salud pública.

Resumiendo, si te gustan los mapaches y se te había pasado por la cabeza hacerte con uno, te animamos a descartar la idea. Lo mejor que puedes hacer por un mapache es respetarlo en su condición de animal salvaje y evitar el sufrimiento que supondría, para el propio animal, tratar de domesticarlo. 

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