Conejo belier (lop): características y cuidados

Los conejos lop, llamados así por la forma tan singular de sus orejas, anchas y caídas, surgen a comienzos del siglo XIX y son más pequeños que los conejos lop de los que proceden. Dentro de esta especie se pueden establecer diferencias en cuanto al tamaño, tanto del propio animal como de sus orejas. De este modo, habría que distinguir entre varias razas de conejos belier:

• inglés
• alemán
• francés
• de los Países Bajos
• cabeza de león 
• enano; como su propio nombre indica, más pequeño aún que los ejemplares anteriores.

Pese a esta distinción, en líneas generales, esta raza de conejos es bastante pequeña, pues los ejemplares no suelen medir más de 70 cm y su peso oscila entre los 3,5 kg del lop alemán y los 1,5 kg del lop enano.

Como ya hemos comentado, lo más característico de este animal son las orejas, que caen a ambos lados de la cabeza; en algunos casos, incluso arrastran cuando caminan por el suelo. Además, son bastante anchas en comparación con el propio tamaño de la cabeza y con el resto del cuerpo. El pelaje de todos ellos es bastante similar, salvo en el caso de los conejos lop cabeza de león, que presentan más pelo en la cabeza; de ahí su nombre.

¿Cómo cuidar de mi conejo belier?

Los son, por norma general, bastante asustadizos, así que hay que tener mucho cuidado cuando lo queramos acariciar o vayamos a acercarnos a la conejera. Pero una vez que nos conocen, se muestran muy amigables y receptivos para recibir mimos y abrazos de los más pequeños de la casa.

Como cualquier mascota, antes de adoptar un conejo lop es importante que nos informemos sobre su alimentación y los problemas de salud asociados a esta raza. De este modo, sabremos que los belier necesitan salir a hacer ejercicio fuera de la conejera, por lo que es necesario que contemos con espacio más que suficiente para que el animal salga y curiosee por casa o el jardín. Ello le dará la estabilidad emocional que necesita para vivir feliz.

Respecto a su alimentación, es menester cuidar que no tenga sobrepeso. Por ello, es necesario que vigilemos la dieta. Además de pienso y heno, tendremos que ofrecerle vegetales como brócoli, lechuga, tomate, zanahoria, manzana, pera...

Finalmente, hemos de prestar atención a su higiene. Los conejos tienen que estar limpios y recibir, al menos, un cepillado semanal. La limpieza debe extenderse a la conejera, que tendrá que estar acondicionada en un espacio alejado de corrientes de aire y de temperaturas extremas tanto en invierno como en verano.

Como siempre, si surge alguna duda, mejor consultarla con el .