Abril, mes en contra del maltrato animal

Abril es el mes internacional en contra del maltrato animal. La idea surgió de la American Society for the Prevention of Cruelty to Animals (ASPCA), organización que suele llevar a cabo iniciativas encaminadas a salvar especies o concienciar a la ciudadanía sobre el respeto y cuidado de los animales.  Porque, aunque pueda parecer una exageración en los tiempos que corren, el maltrato animal existe en países en los que se supone que se censura el trato degradante a los animales. No hay más que recordar el caso del laboratorio de Vivotecnia. Pero también se da en el ámbito doméstico. De hecho, durante la pandemia se multiplicaron los casos. Y no hemos de olvidar que el abandono animal, que también se incrementó en los meses en los que estuvimos encerrados en casa, es una forma de maltrato.

Aunque en el nuevo Anteproyecto de Ley de Protección Animal, recientemente aprobada por el Gobierno, se prevén penas de hasta dos años de cárcel por crueldad, maltrato animal y abandono, no está mal recordar que existen otras iniciativas que persiguen lo mismo, como la Declaración Universal de los Derechos del Animal, aprobada por la UNESCO en 1978, dotar a los animales de derechos para que puedan vivir en libertad y sean respetados, ya sean en su propio hábitat, ya sea en el seno del hogar si es un animal de compañía, y denunciar y perseguir aquellos casos en los que ello no se cumpla.

Por eso, la designación de abril como el Mes contra el Maltrato Animal es una iniciativa perfecta para llamar la atención sobre este problema. Gracias a la concienciación, cada vez son más las personas, empresas e instituciones que se adhieren a ella y que se colocan el lazo naranja o tiñen de este color edificios emblemáticos. En Nueva York, por ejemplo, el lema «Go Orange for animals» es la causa de que monumentos como el Empire State se cubran de naranja.

Denunciar el maltrato

Nosotros como ciudadanos podemos combatir esta lacra denunciando cualquier caso de maltrato del que seamos testigos. Porque solo de este modo es posible acabar con los casos de violencia que afectan a los animales.

¿Y qué casos son susceptible de denuncia y constitutivos de delito?

Por supuesto, cualquier tipo de violencia física que se ejerza contra un animal (golpes, patadas, mutilaciones, heridas, etc.); abandonar a un animal que haya estado viviendo en nuestro núcleo familiar; no alimentarlo de manera adecuada (malnutrición) o alimentarlo con ingredientes en mal estado o susceptibles de ser dañinos para el animal; dejarlo en la calle (parcela, jardín, terraza...) bajo las inclemencias del tiempo (frío, calor, lluvia, nieve...); emplear malas praxis en animales para experimentar o al hacer pruebas médicas; no suministrarle el tratamiento veterinario necesario en el caso en el que esté enfermo, no tenerlo al día con las o no desparasitarlo ni cuidar su higiene o salud.

¿Y qué hacemos si descubrimos un caso de maltrato? Si observamos algunas de estas prácticas, lo adecuado es contactar con el SEPRONA-Guardia Civil para que abra las diligencias oportunas al dueño del animal.