Ya sea que te estés mudando al extranjero, planeando unas vacaciones largas, o necesites viajar en avión con tu perro por cualquier motivo, la planificación es fundamental. El viaje aéreo puede resultar estresante y complicado para las mascotas, especialmente porque a menudo no pueden quedarse contigo en la cabina durante todo el trayecto. Cuando sea posible, considera alternativas; si volar es tu única opción, aquí tienes todo lo necesario para que el viaje sea seguro, fluido y lo menos estresante posible para tu perro.
En España, para viajar con perros entre países de la Unión Europea, es obligatorio contar con el pasaporte para animales de compañía, expedido por un veterinario autorizado, que certifica que tu perro está vacunado correctamente y cumple con los requisitos sanitarios. Este documento permite evitar cuarentenas largas a la vuelta y debe obtenerse con suficiente antelación. Para información más detallada sobre los requisitos de viaje y cuarentena, consulta la página del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación o la web oficial de la Unión Europea para mascotas.
Tu perro debe tener al menos ocho semanas de edad y estar completamente destetado al menos cinco días antes del viaje para cumplir con las normativas de las aerolíneas. Además, es indispensable que esté sano y con todas sus vacunas al día para un vuelo seguro. Lleva contigo los registros veterinarios actualizados y un certificado de salud reciente emitido por tu veterinario para presentarlo en el aeropuerto. Generalmente, tanto las aerolíneas como las autoridades aeroportuarias requieren inspeccionar la salud de tu perro y su transportín, pudiendo aplicar tasas por el servicio.
Las aerolíneas españolas y europeas varían en sus normas sobre el transporte de mascotas. Algunas solo permiten perros en ciertas rutas y muchas limitan el número de animales por vuelo. No asumas que podrás incluir a tu perro después de reservar tu billete. Confirma las políticas específicas para mascotas con anticipación y reserva el transporte para tu perro con antelación para asegurar su plaza.
Los perros pequeños (normalmente menos de 8 kilos) suelen poder viajar contigo en cabina si entran en un transportín autorizado por la aerolínea. Sin embargo, en muchos vuelos, los perros deben viajar en la bodega o área de carga. Aunque esta zona suele estar climatizada y ventilada, puede estar oscura y el personal no puede acceder a ella durante el vuelo. Es fundamental elegir vuelos directos y rápidos, comprobar las instalaciones para mascotas de la aerolínea y asegurarse de que el viaje será cómodo y seguro para tu perro.
Aunque algunos veterinarios o transportistas puedan sugerir la sedación, esta práctica es generalmente desaconsejada por los riesgos para la salud y las restricciones de las aerolíneas. Consulta siempre con tu veterinario para recibir consejos personalizados antes de considerar cualquier medicación para tranquilizar a tu mascota. Recuerda que el estrés del vuelo puede afectar a tu perro más de lo que indica la duración del trayecto. Una buena preparación, la elección responsable de la aerolínea, y un cuidado atento son clave para garantizar la máxima seguridad durante el viaje aéreo.
Por último, colaborar con aerolíneas reconocidas que tengan políticas claras y amigables para los animales y contar con la asesoría de tu veterinario y de entidades de bienestar animal tanto en el país de origen como en el de destino contribuirá a proteger a tu perro en cada etapa del viaje.
Viajar en avión con tu perro requiere paciencia, preparación y cariño, pero con el enfoque adecuado, tú y tu amigo peludo podrán disfrutar de un viaje tranquilo y confiado.