Traer un cachorro nuevo a casa implica crear un entorno donde pueda aprender y crecer con seguridad. Prepárate para proteger tu casa retirando objetos que pueda morder, como zapatos, cables o ropa suelta. Utiliza transportines, vallas y puertas para limitar el acceso de tu cachorro a ciertas áreas. Esto ayuda a formar buenos hábitos, como morder juguetes en lugar de objetos del hogar. También asegúrate de que las plantas o pequeños objetos que puedan ser tóxicos estén fuera de su alcance. Una buena preparación ahora ahorra tiempo y estrés después.
Al buscar cachorros en venta, elige siempre criadores responsables que prioricen la salud y el temperamento, asegurando que tu nuevo amigo comience con la mejor base.
Los cachorros se sienten cómodos con la rutina porque les aporta previsibilidad. Establece horarios consistentes para la alimentación, los descansos para ir al baño, el juego y el descanso. Alimenta a tu cachorro tres veces al día a horas similares para ayudar a regular su digestión y necesidades fisiológicas. Llévalo frecuentemente al lugar designado para hacer sus necesidades — idealmente cada hora durante el día y justo después de comer, dormir o jugar — para fomentar el éxito y recompensarlo con elogios y premios cuando acierte.
Los cachorros exploran el mundo con la boca y suelen morder durante el juego. En vez de asustar a tu cachorro, ofrécele suavemente un juguete para morder y así redirigir las mordidas hacia objetos adecuados. Si sigue mordiendo, pausa calmadamente el juego unos momentos para que entienda que morder detiene la diversión, reforzando un comportamiento amable sin castigos.
Las noches pueden ser difíciles ya que los cachorros extrañan a sus hermanos de camada. Durante las primeras noches, coloca el transportín o cama de tu cachorro en tu dormitorio o en un espacio designado donde puedas ofrecerle seguridad y tranquilidad. Estar cerca les ayuda a sentirse seguros y te permite responder rápidamente a sus necesidades de ir al baño por la noche, algo habitual en esta etapa.
La socialización durante las primeras 16 semanas es crucial para que tu cachorro se convierta en un perro adulto confiado y equilibrado. Introduce a tu cachorro poco a poco a diversas personas, otros animales, sonidos y ambientes — como aspiradoras, ruidos de tráfico, viajes en coche y diferentes superficies. Hasta que esté completamente vacunado, llévalo en brazos para evitar riesgos, asegurándote siempre de que cada experiencia nueva sea positiva y tranquila. Usa premios y paciencia para crear buenas asociaciones, ayudando a que tu cachorro crezca sin miedo.
Tu cachorro necesita aprender que eres un compañero seguro y cariñoso. Dedica tiempo de calidad para jugar y explorar su nuevo mundo juntos con calma. Este vínculo temprano es la base de la confianza, haciendo que el adiestramiento futuro sea más sencillo y agradable para ambos.
Para más orientación, visita la página de la entrenadora canina Vicky Carne, que ofrece consejos amables y actualizados acordes a las mejores prácticas actuales.