Muchos dueños de perros en España han visto videos divertidos en internet donde los perros parecen mirar la televisión con atención, siguiendo objetos en movimiento como una pelota de tenis o reaccionando a ladridos de otros perros en pantalla. Es encantador ver a los perros aparentemente interesados en lo que se proyecta en la televisión.
Algunas personas dejan la televisión o la radio encendidas como ruido de fondo para consolar a sus perros cuando se van de casa, ayudándoles a sobrellevar la soledad o la ansiedad al proporcionarles cierta compañía. Para perros acostumbrados a esto, la televisión puede ser una parte normal de su entorno.
Pero una pregunta común es: ¿realmente los perros entienden lo que sucede en la pantalla? ¿Pueden reconocer sonidos o imágenes, y podrían asustarse o ponerse tensos al ver géneros intensos como películas de terror o suspenso? Este artículo explora lo que los perros perciben al ver televisión, especialmente durante películas de miedo o suspenso.
Si tu perro o cachorro es nuevo en ver la televisión, su primer encuentro suele estar marcado por la curiosidad o la sorpresa. Sonidos inesperados e imágenes en movimiento desde una fuente desconocida pueden causar interés o confusión. Los cachorros de hogares sin televisión pueden al principio estar desconcertados por este estímulo novedoso.
La visión de los perros es diferente a la nuestra; perciben menos colores, principalmente azules y amarillos, mientras muchos otros colores se mezclan en tonos grises. Si tu perro está centrado en la pantalla, probablemente las imágenes contengan muchos tonos azulados o amarillos. Los perros también son muy sensibles al movimiento, haciendo que escenas dinámicas, deportes o juegos sean más intrigantes que imágenes estáticas.
Las señales auditivas de la televisión pueden ser más desconcertantes para los perros. Pueden tratar de localizar la fuente de las voces o ruidos, inspeccionando a veces detrás del televisor para entender qué ocurre. Afortunadamente, usualmente se adaptan rápido y aceptan los sonidos de la televisión como parte de su ambiente.
Los perros tienden a considerar la música y las voces humanas de la televisión como un ruido de fondo, a menos que un sonido en particular llame su atención, por ejemplo, el ladrido de otro perro puede despertar su interés o provocar una respuesta vocal.
Es posible que algunos perros desarrollen preferencia por ciertas voces humanas o actores si esos sonidos resultan calmantes o familiares. Estas reacciones se basan en el reconocimiento auditivo más que en la identificación visual de la persona en pantalla.
Ocasionalmente, los perros reaccionan a sonidos inusuales como ciertas notas musicales, efectos sonoros o sonidos agudos, que pueden ser molestos o divertidos. Como los perros escuchan en un rango de frecuencia más alto que los humanos, algunos sonidos en la televisión pueden percibirse diferente o con más intensidad.
Las películas de terror y suspenso emplean música, efectos sonoros y ruidos repentinos para crear tensión y asustar a los espectadores humanos. Estos elementos pueden afectar a los perros, especialmente a aquellos sensibles a ruidos fuertes o inusuales.
Los perros propensos a la ansiedad por ruidos, como los que temen a los fuegos artificiales o tormentas, pueden reaccionar a los sonidos estruendosos comunes en películas de terror. Las reacciones pueden incluir temblores, esconderse, ladrar o intentar escapar de la habitación. El movimiento y los sonidos desconocidos que emite la televisión también pueden aumentar su estrés.
Es importante reconocer que los perros no reaccionan al contenido tal como lo hacen los humanos; no entienden la historia ni el motivo del miedo de la misma forma, pero responden a señales auditivas y ambientales.
Al ver una película de terror, la reacción de tu perro puede variar. Algunos perros ignoran completamente la pantalla, distraídos con golosinas, mientras que otros pueden mostrar miedo escondiendo la cola o buscando consuelo bajo mantas.
Los perros son muy perceptivos con las emociones y el lenguaje corporal de sus dueños, incluyendo cambios en la química del olor causados por el estrés o el miedo. Si estás visiblemente ansioso o asustado, tu perro puede reflejar esos sentimientos y reaccionar de forma similar, captando tu estado de ánimo más que la película en sí.
Si tu perro muestra signos de malestar durante películas con sonidos fuertes o impactantes, puede ser útil proporcionarle un espacio seguro y tranquilo alejado del ruido, o evitar exponerlo a ese tipo de contenido.
Comprender la percepción sensorial única de tu perro ayuda a ofrecer estímulos y enriquecimiento adecuados. Aunque la televisión puede entretener a algunos perros, ellos dependen más de la interacción social real, el ejercicio físico y la estimulación mental para su bienestar.
Asegúrate siempre de que los medios, incluida la televisión, se usen como complemento y no sustituto del tiempo de calidad y el cuidado. Los dueños responsables priorizan las necesidades emocionales de su mascota, evitando la sobreestimulación o el estrés siempre que sea posible.
Para quienes consideren añadir un compañero canino a la familia, encontrar un cachorro en criadores reputados o centros de adopción en España garantiza que comiencen con una mascota bien socializada y apoyada, sentando las bases para una relación feliz y de confianza.
Los perros responden a los sonidos e imágenes de la televisión, en particular al movimiento y sonidos familiares. Pueden asustarse o inquietarse por sonidos intensos comunes en películas de terror, especialmente si son sensibles al ruido o captan el estado emocional de su dueño. Sin embargo, no comprenden la historia ni el motivo del miedo como los humanos.
Observando las reacciones de tu perro y ajustando su entorno puedes evitar ansiedad innecesaria. Proporcionar espacios seguros, refuerzo positivo y consultar a profesionales si es necesario son pasos clave para asegurar la comodidad y felicidad de tu perro durante el tiempo de película.
Recuerda, aunque la televisión puede ser entretenida, la conexión en la vida real sigue siendo esencial para un perro sano y realizado.