Puede ser muy frustrante para un propietario de gatos cuando su compañero felino parece ignorar la bandeja sanitaria y elige utilizar el suelo, los zapatos o incluso una cama. Los gatos son animales naturalmente muy limpios, por lo que los problemas con la bandeja suelen indicar causas subyacentes.
En esta guía completa, exploraremos las 10 razones más comunes por las que los gatos pueden negarse a usar sus bandejas sanitarias y soluciones prácticas para ayudarte a restaurar la armonía en tu hogar.
Los gatos suelen ser estoicos y pueden no mostrar signos evidentes de malestar. Sin embargo, si tu gato asocia dolor con el uso de la bandeja, podría deberse a condiciones médicas como infecciones urinarias, estreñimiento o incluso una obstrucción urinaria, especialmente común en gatos machos, lo cual es una emergencia veterinaria en España.
Si observas que tu gato evita la bandeja, es fundamental consultar con tu veterinario con prontitud. Un diagnóstico temprano ayuda a prevenir sufrimiento y complicaciones a largo plazo.
¿Has cambiado recientemente el tipo o la marca de arena? Los gatos pueden ser muy exigentes, y una textura o aroma desconocido de la arena podría desanimarlos a usar la bandeja. Para evitarlo, intenta mantener el mismo tipo de arena que prefiere tu gato, introduciendo cualquier cambio gradualmente.
Algunas arenas contienen químicos para enmascarar el olor de la orina, pero estas fragancias o el olor de arena húmeda podrían molestar a tu gato. Retirar regularmente la arena mojada y renovar la bandeja puede reducir olores ofensivos y tentar a tu gato a usarla de nuevo.
Los gatos son muy exigentes y prefieren una bandeja limpia. Descuidar el rascado diario o la limpieza infrecuente puede hacer que tu gato busque lugares más limpios en casa. Mantener la bandeja limpia de forma constante es vital para fomentar su uso correcto.
Los gatos mayores o con problemas de salud pueden tener dificultades para controlar la vejiga o intestinos. Esto puede causar accidentes a pesar de que quieran usar la bandeja. Consulta con tu veterinario cómo manejar estas condiciones con compasión, asegurando dignidad y comodidad para tu gato.
Los gatos se sienten más vulnerables cuando hacen sus necesidades y prefieren lugares privados y seguros donde puedan observar el entorno. Mover la bandeja a una zona ruidosa, concurrida o expuesta puede provocar su rechazo. Elige un rincón tranquilo y accesible que le ofrezca privacidad.
A los gatos no les gusta eliminar cerca de su comida y agua. Asegúrate de que la bandeja esté bien alejada de las zonas de alimentación para que tu gato se sienta cómodo comiendo y usando la bandeja en lugares separados.
Los gatitos, y a veces gatos adultos, pueden no haber aprendido a usar la bandeja correctamente. Se requiere entrenamiento constante con refuerzo positivo. Tras comer o beber, anima suavemente a tu gato a usar la bandeja colocándolo dentro. La paciencia y la perseverancia son clave.
Cuando un gato ha empezado a hacer sus necesidades fuera de la bandeja y se siente cómodo en un lugar concreto, es un hábito difícil de romper. Usa limpiadores enzimáticos en lugar de amoniaco para eliminar completamente los olores y evitar que vuelva a marcar. Evita cualquier castigo, ya que aumenta el estrés y empeora el problema.
En hogares con varios gatos, proporciona al menos una bandeja por gato más una extra. Los gatos son territoriales y suelen rechazar compartir bandejas. Además, algunos gatos prefieren orinar en una bandeja y defecar en otra, por lo que más bandejas reduce accidentes y estrés.
Recuerda, los gatos no usan la bandeja para molestarnos: están comunicando malestar o estrés. Investiga con atención y consulta siempre con tu veterinario si tienes dudas, especialmente si sospechas problemas de salud. Con cuidado adecuado, comprensión y ajustes, la mayoría de problemas con la bandeja se pueden resolver con éxito, mejorando el bienestar de ti y tu amigo felino.