Tailandia, antiguamente conocida como Siam, posee una historia larga y bien documentada en la cría de algunas de las razas de gato más antiguas, conocidas y populares. En Tailandia, los gatos son ampliamente venerados como símbolos de buena suerte y animales de compañía preferidos por la realeza. Exceptuando el antiguo Egipto, donde los gatos eran adorados como dioses, pocos países tienen una historia tan prolongada y trazable de respeto hacia el gato como Tailandia.
Al hablar de gatos autóctonos de Tailandia, a menudo se piensa en el gato siamés. Sin embargo, existen ocho razas nativas originarias de Tailandia, siendo el gato Thai la más antigua entre ellas. Esta raza dio origen al gato siamés moderno y ha influido en muchas otras razas mundialmente, aunque sigue siendo mucho menos común fuera de Tailandia.
Este artículo explora los orígenes, la evolución y el estado actual del gato Thai, una raza ancestral de adaptación local con un importante patrimonio cultural.
El gato Thai desciende de los gatos autóctonos de Tailandia, lo que lo convierte en una de las razas nativas más antiguas. "Raza local" o landrace se refiere a una variedad tradicional y adaptada localmente de un animal doméstico o planta que ha evolucionado de forma natural en una región determinada. Estos animales se adaptan con el tiempo debido al aislamiento, las demandas ambientales y la evolución natural, sin cruzamientos estrictamente selectivos.
Estas razas tienen una genética uniforme reflejando su origen regional, pero mantienen diversidad genética comparadas con las razas criadas selectivamente. Para conservar una raza local es fundamental evitar cruces indiscriminados con otras razas que puedan diluir el acervo genético original y poner en riesgo su supervivencia.
El gato Thai tiene su ascendencia directa en el Wichien-maat, que se traduce como "Diamante de Luna". Este gato local original aparece en el antiguo Tamra Maew, un manuscrito con poemas sobre gatos que data del Reino de Ayutthaya en Tailandia, ilustrado hace varios siglos.
De manera notable, el Wichien-maat aún existe en Tailandia en su forma pura. La rama del gato Thai se originó en el siglo XIX cuando gatos Wichien-maat fueron llevados a Inglaterra. Allí, con crianza selectiva y cruces tuvieron lugar para crear el siamés moderno, que se caracteriza por un aspecto más delgado y angular en contraste con la cabeza más redondeada y orejas más cortas del gato Thai, características que mantienen el aspecto original de la raza local.
Esta relación cercana pero distinta explica por qué el gato Thai a veces se denomina Siamés Tradicional, Clásico o Estilo Antiguo.
A pesar de su historia documentada, el gato Thai fue reconocido formalmente hace relativamente poco tiempo. La Asociación Internacional del Gato (TICA) reconoció al Siamés Estilo Antiguo como la raza Thai en 2007, otorgándole estatus de Campeonato en 2010. Este reconocimiento permite a los propietarios registrar estos gatos formalmente y participar en exposiciones de raza.
Un papel crucial de esta raza es actuar como un recurso genético para introducir diversidad en el acervo genético de los siameses. El estándar de raza Thai permite cruces tanto con gatos siameses modernos como con gatos Wichien-maat importados, contribuyendo a poblaciones más saludables y a preservar los rasgos únicos de ambas razas.
Se espera que el gato Thai gane popularidad en los hogares y exposiciones de España en los próximos años, a medida que criadores y aficionados sigan promoviendo la tenencia responsable y prácticas éticas.
La veneración de gatos como el Thai en Tailandia trasciende la simple tenencia como mascota. El Wichien-maat, del que deriva el gato Thai, mantiene un significado cultural importante para el pueblo tailandés, representando suerte, prosperidad y patrimonio. Esta raza local ancestral refleja bellamente la armonía entre la naturaleza y la sociedad humana en la historia de Tailandia.
Para quienes en España estén interesados en encontrar un gato Thai o cachorros Thai, es fundamental buscar criadores responsables que prioricen la salud genética y el cumplimiento del estándar de raza. La tenencia ética apoya la preservación de esta valiosa y antigua raza.
Al apreciar y cuidar responsablemente a los gatos Thai, ayudamos a mantener un legado centenario y a enriquecer la diversidad de nuestros queridos compañeros felinos.