El pelaje merle es un patrón moteado distintivo que se observa en perros, formado por parches de color diluido mezclados con áreas sólidas. A diferencia de un color de pelaje único, merle es un patrón genético que modifica los colores base, creando una apariencia atractiva y a menudo llamativa admirada por muchos futuros dueños de mascotas.
Este patrón único puede aparecer en diversos colores como azul, chocolate o rojo, e influye no solo en el pelaje sino también en la pigmentación de la piel subyacente. Frecuentemente provoca colores de ojos interesantes, incluyendo azul o heterocromía (un ojo azul), haciendo que los perros con pelaje merle sean visualmente cautivadores.
La presencia del patrón merle surge de una mutación genética bien estudiada. Las pruebas de ADN pueden confirmar si un perro porta el gen merle, aunque estas solo indican marcadores genéticos sin predecir las variaciones exactas del color.
Sin embargo, el gen responsable del pelaje merle no solo tiene un valor estético. También puede afectar la salud del perro, especialmente si se heredan dos copias del gen merle, lo que aumenta los riesgos de condiciones congénitas serias. Este artículo explica en detalle el pelaje merle, su genética, las razas donde aparece y la importancia de la cría responsable para la salud y el bienestar animal.
El gen merle crea un patrón moteado o irregular al diluir partes del color base del perro. Esto resulta en parches irregulares de tonos más claros embebidos en un pelaje generalmente sólido o manchado.
Los perros pueden presentar pelaje merle en gran parte del cuerpo o tener parches pequeños y poco visibles. Los colores afectados incluyen variados tonos de azul, marrón o negro. Este modificador genético también influye en la pigmentación de la piel en áreas como la nariz y las almohadillas de las patas, así como en la pigmentación ocular, produciendo comúnmente tonos azules o colores diferentes en los ojos de los perros afectados.
El patrón merle está controlado por una mutación en el gen PMEL (SILV), que afecta la producción de pigmento llevando a áreas con colores diluidos. La herencia de este gen es dominancia incompleta, lo que significa que la expresión depende de si se heredan una o dos copias:
La cría de dos perros merle tiene un 25% de probabilidad de producir cachorros merle dobles, que pueden sufrir defectos de salud significativos. El merle críptico es una variante con parches mínimos visibles y complica la detección sin pruebas genéticas.
Los genes modificadores pueden crear variantes interesantes como el merle arlequín, famoso en el Dogo Alemán.
Varias razas reconocidas comercialmente aceptan el pelaje merle como estándar o como patrón aceptable, muy buscado por los entusiastas. Entre ellas se encuentran:
Sin embargo, en algunas razas el merle es considerado defecto y puede estar prohibido para el registro oficial con la Real Sociedad Canina de España (RSCE). Esta restricción surge principalmente para minimizar los riesgos de salud asociados con la producción de cachorros merle dobles, promoviendo prácticas éticas de cría.
El gen merle puede tener implicaciones sanitarias más allá del patrón del pelaje, especialmente cuando se heredan dos copias (merle doble). Las preocupaciones comunes incluyen:
La investigación destaca que el merle doble combinado con manchas píebald presenta el mayor riesgo de defectos severos. Por ello, es esencial para los futuros propietarios verificar si un perro es merle simple o doble antes de adquirirlo.
Al considerar un perro con pelaje merle o descendencia merle, es fundamental:
La cría responsable y las decisiones de compra informadas ayudan a mantener la salud y el bienestar de los perros con este patrón de pelaje llamativo pero genéticamente complejo.