Aunque los gatos suelen ser menos propensos que los perros a sufrir golpes de calor y agotamiento por calor, mantenerlos frescos y cómodos en verano requiere cuidados atentos. Comprender sus necesidades específicas ayuda a protegerlos del sobrecalentamiento o las quemaduras solares.
A continuación, te ofrecemos los mejores consejos para dueños de gatos que desean mantener a sus felinos seguros y contentos cuando las temperaturas suben en verano.
1. Entiende el color del pelaje de tu gato y su sensibilidad al sol
El color del pelaje influye en cómo tu gato maneja el calor y el sol:
- Gatos de pelaje oscuro: Los gatos con pelaje negro o oscuro absorben más calor y pueden calentarse rápidamente, pero su piel más oscura ofrece mejor protección natural contra los rayos UV.
- Gatos claros o blancos: Estos reflejan más el calor, ayudándoles a mantenerse frescos, pero tienen mayor riesgo de quemaduras solares, especialmente en zonas con poco pelo o rosadas como la nariz y las orejas. Aplica protector solar seguro para gatos en las zonas expuestas y ofrece muchas áreas con sombra.
Vigilar el comportamiento de tu gato y ajustar la exposición solar es clave para evitar estrés térmico o daños en la piel.
2. Proporciona acceso constante a agua fresca y fresca
La hidratación es fundamental todo el año y más en verano. Mantén varios recipientes con agua fresca en casa y en el jardín.
- Coloca los recipientes en lugares sombreados y frescos para evitar que el agua se caliente y crezcan bacterias.
- Algunos gatos prefieren el agua corriente; un bebedero con fuente puede animarlos a beber más.
- Renueva el agua frecuentemente para que esté siempre limpia y fresca.
- En exteriores, las fuentes naturales como charcos o el rocío son más escasas en verano, por eso tu gato beberá más de los recipientes.
3. Evita superficies calientes que puedan quemar las patas
Las aceras, terrazas y asfaltos pueden calentarse mucho y dañar las sensibles almohadillas de las patas de tu gato. Si caminar descalzo por una superficie te resulta incómodo, probablemente no sea segura para tu gato.
- Asegura rutas sombreadas cuando tu gato esté en el exterior.
- Utiliza una manguera para mojar terrazas o caminos que se calienten mucho al sol directo.
- Evita paseos en las horas de mayor calor o sobre superficies muy calientes.
4. Evita que tu gato quede atrapado en espacios calurosos o cerrados
Lugares cálidos como invernaderos o terrazas cerradas pueden alcanzar temperaturas peligrosas rápidamente, con riesgo de golpe de calor o asfixia si el gato no puede salir.
- Asegúrate de que puertas y ventanas ofrezcan una vía de escape para tu gato.
- Revisa cobertizos, casetas y otras zonas antes de cerrar para evitar atrapamientos accidentales.
- Observa a tu gato y conoce sus sitios habituales para esconderse.
5. Ajusta los horarios de comida y la conservación de alimentos
La comida húmeda para gatos se estropea rápido con el calor, atrayendo moscas y bacterias que pueden afectar su salud.
- Guarda la comida en un lugar fresco y sombreado.
- Ofrece comida húmeda en las horas más frescas, como por la mañana temprano o al anochecer.
- Limpia los recipientes de comida con regularidad para mantener la higiene.
6. Reconoce y prevén el golpe de calor en gatos
Los gatos son menos propensos que los perros a sufrir golpe de calor, pero siguen siendo vulnerables, especialmente con exposiciones prolongadas al sol o sin acceso a sombra y agua.
- Observa señales como letargo, desorientación, jadeo excesivo, salivación o colapso.
- Si detectas síntomas, traslada a tu gato a un lugar fresco, ofrécele agua y contacta con el veterinario para asesoramiento.
- Fomenta que tu gato descanse en zonas frescas y sombreadas frecuentemente.
7. Consejos adicionales para refrescar y crear un ambiente cómodo
Para ayudar aún más a tu gato a mantenerse fresco y cómodo:
- Usa ventiladores o aire acondicionado en interiores, asegurando que los ventiladores estén fuera del alcance de tu gato.
- Cierra cortinas o persianas durante las horas de sol intenso para reducir el calor interno.
- Proporciona alfombrillas refrigerantes o camas de materiales ligeros y transpirables para sus lugares de descanso.
- Ofrece snacks helados o rocía ligeramente toallas húmedas para refrescar por evaporación.
- Un cepillado regular ayuda a eliminar el pelo sobrante y mejora la disipación de calor.
Combinando hidratación cuidadosa, protección solar, ajustes del entorno y atención constante, asegurarás que tu gato se mantenga seguro, saludable y feliz durante los meses más cálidos del verano.
Ante cualquier duda sobre la tolerancia al calor o el comportamiento de tu gato en verano, consulta siempre a tu veterinario de confianza.