Todos los perros disfrutan morder, sobre todo los cachorros. Morder satisface muchas necesidades naturales, calma el estrés y alivia las molestias de la dentición. Sin embargo, algunos cachorros pueden ser muy destructivos, desgarrando incluso los juguetes más resistentes rápidamente, lo que puede ser frustrante y costoso.
Esta guía presenta 6 pasos prácticos para ayudarte a controlar y reducir el morder destructivo, elegir los mejores juguetes y fomentar hábitos positivos en tu cachorro.
Selecciona juguetes apropiados para la raza, tamaño y fuerza de mordida de tu cachorro. Los juguetes duraderos de goma o nylon, como los Kongs, son muy populares en España y resisten muy bien el mordisqueo intenso. Evita los juguetes con relleno o chirriadores si tu cachorro suele romperlos, ya que tragar esas partes puede ser peligroso.
Siempre vigila a tu cachorro mientras juega. Si notas que empieza a morder destruyendo juguetes, interrumpe la acción con calma para redirigir su atención. Retira los juguetes dañados para evitar riesgos de atragantamiento y para que no refuerces la idea de que destruir está permitido.
Involucra a tu cachorro en juegos interactivos como traer objetos o tirar de cuerdas. Esto le ayuda a entender que los juguetes son para jugar, no para destruir. Elogia siempre el juego suave para fomentar buenos hábitos y establece límites gradualmente al morder.
El aburrimiento suele causar morder destructivo. Utiliza juguetes tipo puzzle o Kongs rellenos con premios o yogur congelado para mantener la mente de tu cachorro ocupada y satisfacer sus ganas de morder de forma productiva. Hacer ejercicio regularmente también ayuda a reducir el exceso de energía que puede fomentar comportamientos destructivos.
Rota los juguetes de tu cachorro con frecuencia para mantener su interés y evitar el aburrimiento. Además, proporciona objetos seguros y económicos para destruir, como zapatos viejos o botellas de plástico vacías (sin etiquetas ni tapones), que pueda morder y destruir sin riesgos ni coste elevado.
Algunos mordisqueos destructivos pueden ser indicio de dolor por dentición o comportamientos compulsivos por ansiedad. Si sospechas que el morder de tu cachorro es excesivo o está relacionado con malestar, acude a tu veterinario o a un adiestrador profesional para abordar los problemas subyacentes con sensibilidad y eficacia.
Combinando las elecciones correctas de juguetes, supervisión, entrenamiento divertido y enriquecimiento mental, podrás guiar con suavidad a tu cachorro hacia un mordisco más seguro y disfrutar juntos de un tiempo de juego más feliz y menos destructivo.