El Bulldog Francés es una de las razas de perros más populares en España, apreciado por sus rasgos únicos como el rostro achatado, cuerpos musculosos y compactos, y sus expresivas orejas, que lo hacen fácilmente reconocible. Más allá de su encantadora apariencia, el color del pelaje juega un papel importante en los estándares de la raza y la demanda de cachorros en España.
En este artículo, profundizaremos en los colores del bulldog francés reconocidos por la Real Sociedad Canina de España (RSCE), explicaremos qué significa "color no reconocido" en el registro y exploraremos los llamados colores raros como el azul y el merle. Nuestro objetivo es brindar a futuros compradores y criadores información clara, honesta y actualizada para tomar decisiones informadas que prioricen la salud y la tenencia responsable.
La RSCE, siguiendo las directrices de la Federación Cinológica Internacional (FCI), reconoce formalmente varios colores agrupados principalmente en tres categorías: atigrado, leonado y pío. Esta clasificación determina la elegibilidad para el registro de pedigrí y exposiciones caninas.
Los bulldogs franceses blancos se consideran típicamente una variación de pío, especialmente cuando el blanco domina el pelaje. Si bien el blanco con nariz y ojos negros es aceptable, el blanco sólido sin pigmentación es raro y menos común.
Los perros con estos colores aceptados reciben un registro de pedigrí estándar que documenta oficialmente su color de pelaje.
Cuando los Bulldogs Franceses muestran colores fuera de los estándar reconocidos — como azul, chocolate o merle — pueden ser registrados bajo la categoría "color no reconocido" en la RSCE. Esto permite el registro de pedigrí, pero con la advertencia de que estos colores son considerados no estándar y generalmente indeseables dentro del círculo oficial de la raza.
Los perros registrados con colores no reconocidos no pueden competir en clases estándar según color en exposiciones, lo que limita sus oportunidades de ganar premios o ser usados dentro de líneas de cría estándar. Clubes de raza en España y Europa aconsejan evitar la cría de colores no estándar para prevenir problemas de salud y mantener la integridad del estándar racial.
Varios colores no estándar a menudo son promocionados como "raros" o "únicos" en anuncios, pero su rareza puede estar sobrevalorada debido a incentivos comerciales. Estos colores incluyen:
Es fundamental que compradores y criadores entiendan los riesgos asociados a ciertos colores raros. Los perros azules y lilas suelen padecer alopecia por dilución de color, que afecta gravemente la piel y el pelaje. Los merle presentan una alta predisposición a problemas sensoriales como sordera y pérdida de visión, ligados a la genética del gen merle.
La RSCE y clubes de raza europeos desaconsejan la cría orientada a estos colores raros para prevenir problemas genéticos hereditarios. El bienestar y calidad de vida del perro debe prevalecer sobre la apariencia o la novedad.
Los colores reconocidos proporcionan gran variedad y cumplen con estándares de salud y raza. Si no tienes una preferencia marcada, elegir un perro con un color aceptado es recomendable para la salud, registro oficial y participación en exposiciones.
Si te planteas adquirir un Bulldog Francés de color raro o no estándar, investiga a fondo y dialoga sobre antecedentes de salud y riesgos con el criador o propietario. Recuerda que la personalidad y compatibilidad del perro con tu estilo de vida son más importantes que el color de su pelaje.
Si tu deseo es un color raro, considera otras razas en las que estos colores sean estándar para evitar comprometer la salud y la ética.
Comprendiendo esta información, podrás tomar una decisión informada, respetuosa con el bienestar del Bulldog Francés y tus necesidades como dueño.
Para cachorros de Bulldog Francés de criadores serios, siempre busca aquellos registrados que prioricen la salud y prácticas éticas de cría.