La Nochevieja puede ser un momento desafiante para muchos perros debido a los ruidos fuertes, fuegos artificiales y el bullicio general, similar a la celebración de San Juan en España. Estos elementos estresantes pueden hacer que la noche sea difícil no solo para tu amigo peludo sino también para ti. Para asegurar que tu perro se sienta tranquilo y cómodo en esta época festiva, hemos recopilado diez consejos expertos basados en las mejores prácticas actuales y adaptados al contexto español.
No te sorprendas por los fuegos artificiales y las celebraciones ruidosas. Espera estos eventos y planifica cómo manejarás el entorno de tu perro a medida que aumente el ruido. Lo ideal es desensibilizar a tu perro gradualmente a los sonidos fuertes y fuegos artificiales durante todo el año, no solo en Nochevieja. Este ajuste continuo ayuda a reducir el miedo y la ansiedad.
Si tu perro es sensible o propenso al pánico, es recomendable que un miembro de la familia se quede en casa en Nochevieja para brindarle consuelo y supervisión. Decidir esto con antelación puede evitar malentendidos y asegurar que tu perro tenga una presencia calmada y reconfortante durante las fiestas.
Limita a tu perro a una habitación tranquila o a su cuna si está acostumbrado a ella. Haz que este espacio sea acogedor con su cama favorita, juguetes y mantas. Debe ser un santuario que tu perro perciba como seguro y reconfortante, nunca como un castigo.
Los fuegos artificiales y las celebraciones traen estallidos fuertes y luces intermitentes. Amortigua el ruido poniendo la radio o televisión a un volumen razonable antes de que comiencen los fuegos artificiales, lo que puede ayudar a cubrir los sonidos exteriores sin aumentar el estrés de tu perro. Además, cerrar las cortinas evitará que las luces parpadeantes afuera lo distraigan o asusten.
Productos como collares de feromonas, difusores o sprays calmantes pueden ayudar a reducir la ansiedad imitando olores naturales que reconfortan. Consulta con tu veterinario para opciones recomendadas y úsalos como parte de un enfoque multifacético para calmar a tu perro.
Asegúrate de que tu perro realice una larga y energética caminata durante el día mientras aún hay luz natural. Un perro cansado reacciona menos a estímulos estresantes y tiende a relajarse cuando comienza el ruido. Evita paseos por la noche cuando es más probable que haya fuegos artificiales.
Mantén la mente de tu perro ocupada con juguetes interactivos, puzzles con premios o juegos suaves. Estas actividades pueden ayudar a desviar su atención de los ruidos externos desagradables y reducir el estrés.
Tu perro es sensible a tu estado de ánimo. Mantente relajado y actúa con normalidad, ya que reaccionar exageradamente a su ansiedad puede empeorar su malestar. Un comportamiento tranquilo y seguro le señala a tu perro que no necesita tener miedo.
Si vives en una zona con mucha actividad pirotécnica o reuniones ruidosas, considera pasar la Nochevieja en la casa más tranquila de un amigo o familiar. Las zonas rurales o menos pobladas suelen ser mucho más pacíficas y menos estresantes para perros sensibles.
Si tu perro sufre de ansiedad severa o pánico, habla con tu veterinario con suficiente antelación a la Nochevieja. Pueden recomendar medicamentos prescritos, suplementos o estrategias de modificación de conducta para ayudar a manejar el miedo de forma más eficaz.
Implementando estos pasos cuidadosos puedes asegurarte de que tu perro se sienta seguro y cómodo, transformando una noche potencialmente estresante en una experiencia tranquila para ambos.
Para quienes buscan adoptar un cachorro o desean consejos sobre la tenencia responsable de perros, siempre recomienda elegir criadores éticos o considerar la adopción de refugios locales para promover una atención responsable de las mascotas en España.