A los perros les encanta compartir tiempo con sus dueños, especialmente al aire libre, ¿y qué mejor forma de pasar momentos juntos que montando en bicicleta? En España, tu perro puede acompañarte viajando en una cesta o remolque, o corriendo a tu lado. La mejor opción depende del tamaño, edad, salud y estado físico de tu perro.
Los cachorros y las razas pequeñas suelen ser ideales para una cesta de bici, mientras que un remolque es más adecuado para perros más grandes o con menos energía. Los perros con alta energía pueden disfrutar corriendo a tu lado por rutas tranquilas. Antes de empezar, considera algunas recomendaciones importantes para garantizar la seguridad.
Si tienes un cachorro o una raza pequeña, una cesta para bici es una opción fantástica. Fíjala con seguridad en el manillar o en la parrilla trasera, asegurándote de que esté acolchada y tenga puntos de anclaje seguros. Usa un arnés para sujetar a tu perro dentro y evitar que salte de repente. Las cestas pueden ser de mimbre, metal o tejido, algunas incluyen compartimentos para agua y golosinas.
Acostumbra a tu perro gradualmente introduciéndolo a la cesta fuera de la bici primero. Déjalo explorarla en calma y con seguridad. Cuando esté listo, coloca a tu perro dentro junto a la bici estacionaria, manteniéndolo tranquilo con caricias y palabras suaves mientras le pones el arnés. Después camina junto a la bici para que se acostumbre al movimiento antes de iniciar el recorrido lento por caminos lisos.
Aumenta gradualmente la distancia y velocidad, recompensando el comportamiento tranquilo con premios. Evita terrenos accidentados y pendientes pronunciadas, ya que un perro en la parte delantera puede afectar la dirección de la bici: inclínate hacia atrás y usa principalmente el freno trasero para detenerte. Nunca dejes solo a tu perro en la cesta para evitar accidentes.
Para trayectos largos o perros con menos energía, un remolque trasero es una excelente opción. Asegúrate de que el remolque sea lo suficientemente espacioso para que tu perro pueda estar de pie, sentado y echado cómodamente. Busca ruedas grandes, un centro de gravedad bajo para mayor estabilidad y un suelo desmontable para facilitar la limpieza. Es vital que tenga protección contra la intemperie y buena ventilación para mantener cómodo a tu perro.
Las medidas de seguridad deben incluir enganche para arnés, correa de seguridad para el enganche, frenos automáticos, reflectantes y una bandera de seguridad para mejorar la visibilidad. Acostumbra a tu perro dejando que explore el remolque dentro de casa primero, luego colócalo en la bici y da paseos cortos, aumentando la duración conforme tu perro se relaje.
Haz pausas regulares para que el perro pueda salir, estirarse y beber agua. Siempre asegúrate de que el remolque esté bien enganchado antes de montar y revisa con frecuencia los neumáticos y frenos. Esta opción permite a perros mayores o con problemas de salud disfrutar aire fresco de forma segura.
Los perros enérgicos se benefician corriendo junto a ti, combinando ejercicio y compañía. Tu perro debería tener al menos un año y contar con permiso veterinario para esta actividad. Considera la complexión de tu perro, pues los más ligeros pueden correr más distancia. Las razas braquicéfalas (de cara achatada) deben evitar este ejercicio por riesgo de sobrecalentamiento.
Antes de montar, asegúrate de que tu perro obedezca comandos como "junto" y "alto". Usa accesorios diseñados para bici, como correas rígidas que se conectan al cuadro y se sujetan a un arnés antitirones. No sostengas la correa con la mano mientras pedaleas, ya que es peligroso y puede provocar accidentes.
Equipa a tu perro con un chaleco reflectante y botines protectores para cuidar sus patas de superficies calientes o ásperas. Empieza caminando con él junto a la bici con correa, luego avanza progresivamente hacia paseos cortos por vías tranquilas y lisas. Observa signos de cansancio y trota al principio poco a poco, con descansos y agua fresca frecuentes.
Evalúa el tamaño, temperamento y condición física de tu perro antes de elegir cómo ir en bici juntos. Las razas pequeñas y cachorros suelen preferir cestas, mientras que perros grandes o mayores se benefician de remolques. Si tienes un perro muy enérgico y bien entrenado, correr a su lado puede ser la mejor manera de ejercicio, pero requiere preparación y equipamiento adecuado para la seguridad.
Consulta siempre con tu veterinario antes de iniciar cualquier actividad física nueva con tu perro. La tenencia responsable implica supervisar la salud y comodidad de tu perro durante los paseos y adaptarse a sus necesidades.
Montar en bici con tu perro puede ser una forma alegre de fortalecer el vínculo y mantenerse activo, combinando aire fresco y buena compañía de manera segura y responsable.