El Lhasa Apso es una raza pequeña y regia, conocida por su largo y denso pelaje doble que necesita un cuidado regular. Este pelaje puede estilizarse de varias maneras populares, cada una con diferentes necesidades de mantenimiento y aspecto, ofreciendo flexibilidad a los propietarios según su estilo de vida y preferencias.
El pelaje tradicional de exposición mantiene la apariencia natural del Lhasa Apso, recordando su herencia tibetana. Este estilo se caracteriza por un pelaje largo y fluido que destaca la elegancia y encanto característicos de la raza.
Mantener este aspecto requiere dedicación diaria. Los propietarios deben cepillar el pelaje a diario con un cepillo slicker y un peine metálico para evitar enredos y nudos. Dividir el pelo y cepillar por capas garantiza un cuidado correcto del subpelo, facilitado a menudo con sprays desenredantes para suavizar el cepillado.
Los baños mensuales son esenciales para mantener limpio y saludable el pelaje. Este estilo es el más exigente en mantenimiento pero preserva la imagen auténtica de la raza, valorada especialmente para exposiciones.
Para quienes prefieren una rutina menos exigente, un corte para mascotas o salón es una alternativa práctica. Los peluqueros profesionales usan máquinas y tijeras para acortar el pelaje, especialmente en patas, pies y cuerpo, facilitando su manejo diario.
El corte se realiza con cuidado para que el pelo se funda suavemente desde las patas hacia el cuerpo, logrando un aspecto ordenado y limpio. Se pueden usar sprays especiales para tijeras y tijeras curvadas para dar forma delicada a áreas específicas. Este corte reduce significativamente el tiempo requerido para el cuidado diario en comparación con el pelaje largo de exposición, sin perder el look clásico del Lhasa Apso.
El corte teddy bear, inspirado en tendencias coreanas, ha ganado popularidad entre los dueños de mascotas. El pelaje se recorta más corto, con formas redondeadas en la cara y el cuerpo, dando un aspecto suave, esponjoso y juvenil similar a un osito de peluche.
Este estilo combina la ternura con facilidad de mantenimiento, ideal para quienes buscan un look moderno y práctico. Suaviza los rasgos faciales del perro y es más sencillo de mantener limpio y arreglado con un cuidado regular.
Además de estos estilos estándar, los propietarios de Lhasa Apso pueden experimentar con opciones creativas gracias al largo del pelo en la cabeza. Estilos como moños altos, colas de caballo, trenzas, buns y coletas permiten looks divertidos y originales para ocasiones especiales.
Para perros de exposición, la técnica de envolver el pelo es popular. Después de un baño y con el pelaje limpio, se cepilla suavemente, se aplica acondicionador sin enjuague y se secciona el pelo para envolverlo en papel de arroz. Esto protege el pelaje, lo mantiene limpio y reduce el cepillado diario al mínimo. No obstante, las envolturas deben retirarse y rehacerse semanalmente, requiriendo sesiones completas de peluquería ocasionalmente.
El éxito en el cuidado del Lhasa Apso requiere buenas herramientas y una rutina constante:
Una rutina regular no solo mantiene el pelaje saludable sino que también ayuda a observar la salud de la piel y fortalece el vínculo con tu mascota.
Antes de elegir un Lhasa Apso, es fundamental considerar el compromiso que implica su cuidado. Su pelaje requiere atención diaria, que puede tomar 30 minutos o más especialmente en pelajes largos de exposición. Si prefieres menos mantenimiento, los estilos recortados o cortos son mejores. Independientemente del estilo, una rutina regular previene molestias, problemas de piel y garantiza que tu Lhasa Apso sea un compañero feliz y sano.
Siempre busca un criador ético o una organización de rescate para promover la cría responsable y la tenencia ética.
Los estilos de peluquería para Lhasa Apso varían desde pelajes de exposición de alto mantenimiento hasta cortes prácticos y el divertido estilo teddy bear. Escoge un estilo acorde a tu vida y prepárate para dedicar tiempo al cuidado regular. Con el cuidado adecuado, el hermoso pelaje del Lhasa Apso es un placer para admirar y cuidar, aumentado el vínculo con esta raza tan carismática.