El colapso traqueal en perros es una condición progresiva donde los anillos de cartílago que sostienen la tráquea se debilitan y aplanan. Esto provoca un estrechamiento de las vías respiratorias que dificulta la respiración. La tráquea es fundamental porque transporta el aire desde la nariz y la boca hacia los pulmones, y su estructura se mantiene abierta gracias a anillos cartilaginosos firmes.
Cuando estos anillos se debilitan, ya no pueden mantener la tráquea abierta, causando un colapso parcial o completo y dificultando el flujo de aire, lo que genera síntomas que van desde tos leve hasta problemas respiratorios graves.
Aunque la causa exacta no está clara, el colapso traqueal suele estar vinculado a un defecto congénito heredado. Esta anormalidad genética da lugar a anillos de cartílago más frágiles que se deterioran progresivamente y no proporcionan soporte adecuado a la tráquea.
Otros factores que pueden contribuir son la degeneración del cartílago relacionada con la edad (condromalacia), la obesidad, infecciones respiratorias, traumatismos en el cuello y la exposición a irritantes como el humo de tabaco. Enfermedades respiratorias crónicas o cardíacas también pueden agravar la situación.
Las razas pequeñas y miniatura son especialmente propensas al colapso traqueal. En España, razas como el Yorkshire Terrier, el Pomerania, el Caniche Toy, el Chihuahua, el Bichón Maltés y el Carlino (Pug) son las más afectadas. Tanto machos como hembras son vulnerables, y los síntomas suelen aparecer en perros de mediana edad a mayores, generalmente alrededor de los seis o siete años.
La tenencia responsable incluye conocer las predisposiciones raciales y seleccionar criadores serios que realicen pruebas genéticas para disminuir el riesgo de colapso traqueal en cachorros. En España, puedes buscar cachorros de Yorkshire Terrier y otras razas pequeñas en criaderos reconocidos que garantizan buena salud.
El síntoma característico es una tos seca y sonora, parecida al graznido de un ganso, causada por el esfuerzo del perro para forzar el aire a través de una tráquea estrechada. Esta tos empeora con la excitación, el ejercicio o al comer y beber.
Otros signos pueden incluir renuencia al ejercicio, dificultad para respirar, silbidos o sibilancias y, en casos graves, cianosis, donde las encías o la lengua adquieren un tono azulado por falta de oxígeno. Las altas temperaturas y el exceso de peso agravan los síntomas ya que el jadeo y el sobrepeso aumentan la presión sobre las vías respiratorias.
Si detectas estos síntomas, es fundamental acudir al veterinario. El profesional tendrá en cuenta la raza, edad y tipo de tos para sospechar el colapso traqueal.
Entre las pruebas diagnósticas están las radiografías o la fluoroscopia para observar la tráquea durante la respiración. El método más preciso es la endoscopia traqueal bajo anestesia general, que permite observar directamente el colapso y valorar su gravedad de leve a severo.
Actualmente no existe cura para el colapso traqueal, pero con un manejo adecuado, muchos perros pueden tener buena calidad de vida. El tratamiento busca aliviar síntomas y mejorar la respiración.
Estos tratamientos suelen ser de por vida, pero más del 70 % de los perros mejoran significativamente.
Si el manejo médico no es suficiente o la condición es grave, se puede valorar cirugía. La operación más común consiste en colocar anillos sintéticos de polipropileno alrededor de la tráquea para sustituir la función de los anillos cartilaginosos debilitados. Esta intervención tiene una tasa de éxito del 75 % al 85 %, aunque es costosa y generalmente se realiza en clínicas veterinarias especializadas en España.
No todos los perros son candidatos a cirugía, especialmente los mayores o con otros problemas de salud. La cirugía busca restaurar la permeabilidad de la vía aérea y reducir la dificultad respiratoria, aunque no elimina totalmente la tos.
Los propietarios de perros con colapso traqueal pueden ayudar a sus mascotas con las siguientes recomendaciones:
Las revisiones veterinarias periódicas son clave para monitorizar la evolución y ajustar el tratamiento según sea necesario.
Respuesta rápida: Si observas una tos persistente con sonido de graznido o dificultad para respirar, consulta a tu veterinario cuanto antes para valoración y diagnóstico.
Una intervención veterinaria temprana ayuda a controlar los síntomas y mejora el bienestar de tu perro. No demores la visita, sobre todo si la tos es intensa, la respiración dificultosa o aparece cianosis (encías o lengua azuladas), pues pueden indicar una situación de urgencia. El veterinario ofrecerá recomendaciones individualizadas, prescribirá la medicación adecuada y valorará opciones quirúrgicas si fueran necesarias.
El colapso traqueal es una afección respiratoria crónica y progresiva que afecta principalmente a perros de razas pequeñas y miniatura conforme envejecen. Entender sus causas, reconocer los síntomas a tiempo y manejar la enfermedad con tratamiento médico, cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, cirugía, puede ayudar a mantener la calidad de vida de tu perro.
Elegir cachorros de Yorkshire Terrier u otras razas pequeñas de criadores responsables en España ayuda a minimizar riesgos hereditarios. El cuidado veterinario regular y un manejo adecuado son fundamentales para que los perros afectados vivan cómodamente con esta condición.